Oct 2, 2008

Una sopa para los corazones rotos...

Desde el domingo pasado he estado leyendo esa novela grafica, de tantos comics, o novelas graficas, que he bajado ultimamente, le tenía muchas ganas a love and rockets y en el torrent de donde lo baje, estaba también esta historia, que la unica manera en que puedo explicar es como una mezcla extraña entre una telenovela y una serie gringa de tv.

La historia transcurre en Palomar, un pueblo imaginario al norte de México, cerca de la frontera de Estados Unidos. Y, aunque puede ser difícil de entender, toda la historia (la redundancia es adrede) transcurre alrededor de Palomar, si, hay muchos personajes y sus historias son contadas alrededor de muchos años, simplemente Heraclio aparece desde que es un niño y cuando le toca a él ser protagonista, ya es un adulto y esta casado.

Tal vez lo primero que uno nota es que los dibujos son muy básicos, y que ciertas viñetas parecen simples caricaturas del domingo, en lo personal me da un aire a las tiras de Lorenzo y Pepita. Sin embargo, el contexto es crudo y en ciertos aspectos muy violentos.

No hay un personaje central, son muchos y por lo mismo no te enteras de todo lo que pasa en su vida, solo te enteras de la vida que llevan en Palomar, del granito de arena que cada uno pone en la historia del pueblo, a traves de diferentes episodios te cuenta sus tradiciones, sus chismes y las leyendas que entre los pobladores se cuentan. Todo esto para que al final te sientas parte de ese pueblo. Creo que el ejemplo perfecto de esto, es al leer acerca de los miedos de Tonatzin en cuanto a un bombardeo nuclear(la historia fue escrita en el primer lustro de los ochenta, el ultimo retazo de la guerra fria), y al comparar eventos y demás, solo queda un sentimiento de aislamiento, la certeza de que Palomar pudiera existir (de una u otra manera), pero es un mundo totalmente aparte del resto.

PD - A partir del proximo año, con mis finanzas mas sanas, me lanzare por comprar comics que realmente valen la pena, y los de los Hernandez Bros serán de los primeros.